8 CLICHÉS SOBRE LA DISCAPACIDAD INTELECTUAL

DISCAPACIDAD INTELECTUAL

8 creencias populares sobre la discapacidad intelectual

1. La discapacidad intelectual y la discapacidad psiquiátrica son lo mismo.
2. La discapacidad intelectual siempre ocurre al nacer.
3. El síndrome de Down es la principal causa de discapacidad intelectual.
4. Las personas con discapacidad intelectual no saben que son diferentes.
5. Tienen que vivir en una institución.
6. Siempre deben tener alguien que los ayude.
7. No pueden trabajar.
8. No existen medidas efectivas para aumentar la accesibilidad para quienes viven con discapacidad intelectual

Existe poca conciencia sobre la discapacidad intelectual (anteriormente llamada retraso mental), a pesar de que afecta al 1% de todos los niños nacidos. Obtenga más información sobre esta discapacidad, sus causas, el día a día de quienes la padecen y cómo se puede mejorar la accesibilidad.

1. La discapacidad intelectual y la discapacidad psiquiátrica son lo mismo.
Falso. Aunque los resultados de estos dos tipos de discapacidades a veces se parecen entre sí, es importante distinguirlos.
La discapacidad intelectual es el resultado de un deterioro cognitivo que afecta la capacidad de una persona para aprender, pensar y conceptualizar.

La discapacidad psiquiátrica es el resultado de trastornos psiquiátricos discapacitantes como la esquizofrenia, la depresión mayor, el trastorno bipolar, los trastornos de ansiedad y los trastornos de la personalidad. A menudo también se le llama "enfermedad mental", pero esto puede aumentar la confusión entre las dos discapacidades. En cualquier caso, la discapacidad psiquiátrica no afecta el intelecto de una persona. Simplemente les dificulta utilizar sus habilidades intelectuales en determinadas circunstancias o en un estado emocional particular.

2. La discapacidad intelectual siempre ocurre al nacer.
Eso es casi cierto.
La mayoría de las discapacidades intelectuales se originan antes, durante o poco después del nacimiento. En aproximadamente el 8% de los casos, este tipo de discapacidad aparece más tarde después de un accidente, enfermedad o trauma.

3. El síndrome de Down es la causa principal de discapacidad intelectual.
En realidad, se desconoce la causa del 30% de los casos de discapacidad intelectual. Entre las causas conocidas, las más comunes son las condiciones genéticas, las malformaciones cerebrales, los trastornos del metabolismo, los problemas durante el embarazo o durante el parto y las enfermedades infecciosas.

4. Las personas con discapacidad intelectual no saben que son diferentes.
Incluso si nos tranquiliza creer eso, simplemente no es cierto. Pasan por el mismo sufrimiento que cualquier otra persona cuando son objeto de burlas, insultos o rechazos. Quizás aún más porque a menudo son muy sensibles.

5. Tienen que vivir en una institución.
Todas las personas que viven con una discapacidad intelectual son diferentes. Tienen sus propias habilidades y dificultades. Mientras que algunos necesitan cuidados constantes, incluso para el acto cotidiano más simple, otros son perfectamente capaces de vivir por su cuenta en viviendas independientes.

6. Siempre deben tener alguien que los ayude.
Una vez más, se trata de su nivel de independencia. Algunas personas con discapacidad intelectual son perfectamente capaces de comprenderse y expresarse. Puede ser que requieran más tiempo y concentración. Por eso les ayudarás mucho mostrándoles que estás escuchando, que eres paciente y que no te preocupas por nada más. Para ayudarles a orientarse, los carteles ilustrados con colores, símbolos e iconos pueden resultarles muy útiles.

7. No pueden trabajar.
La verdad es que pocas veces se les da la oportunidad. La tasa de desempleo entre las personas reconocidas como trabajadores discapacitados es el doble que la de la población general. Sin embargo, existe accesibilidad a numerosos puestos de trabajo, especialmente en talleres protegidos, también conocidos como centros de trabajo.

8. No existen medidas efectivas para aumentar la accesibilidad de las personas que viven con discapacidad intelectual.
Las formas de discapacidad intelectual son tan variadas que es difícil establecer las necesidades específicas de las personas que viven con este tipo de discapacidad. A continuación se muestra una lista de algunas medidas útiles que pueden facilitar su integración.

- Colocar carteles ilustrados y simplificados con palabras, colores, símbolos e íconos fáciles de entender.
- Proporcionar información que ha sido escrita en un lenguaje sencillo y proporcionada en varios formatos (visual, de audio, etc.).
- Usar alfombras o revestimientos de piso visualmente diferentes, o tiras táctiles para señalar los caminos principales.

Finalmente, la formación de todo el personal, que trata con el público, en la acogida de una persona con discapacidad es una forma concreta de ayudar realmente a su integración.